Limonada leonesa: receta típica Semana Santa
Puede que la semana santa no sea una fiesta tan grande en términos de comidas y cenas típicas (principalmente por la influencia del cristianismo y la cuaresma) y que no sea tan potente como las tradiciones de Navidad en España, pero aun así tiene sus tradiciones y sus costumbres. Por ejemplo, hay varios postres de Semana Santa muy comunes que además están riquísimos.
En León, tienen una receta típica de Semana Santa que también es muy popular: La limonada leonesa.
Esta limonada no es como la típica de limonada amarilla que los niños americanos ofrecen en las películas a sus vecinos durante el verano. De hecho, la limonada leonesa tiene más que ver con un buen vino que con la limonada.
Hoy le explicamos cómo preparar la limonada leonesa y de dónde procede.
Cómo hacer limonada leonesa
Para preparar esta receta típica de Semana Santa, necesitará:
- 2 botellas de vino tinto
- 1/2 Kg de azúcar
- 4 naranjas sanguinas (si es posible)
- 3 limones
- 1 plátano
- 2 o 3 ramas de canela
En una olla o cazuela grande tendrá que verter el vino y el zumo de las naranjas y los limones, seguido de sus cáscaras. Después habrá que pelar el plátano y echarlo partido en dos también a la misma olla junto con las ramas de canela.
Finalmente se añada el azúcar y se mezcle todo bien. Se pueden añadir también orejones, uvas pasas y / o un poco de ron, pero eso es opcional.
Se tarda en preparar aproximadamente media hora. Después de ese tiempo podemos probar la mezcla para comprobar si necesita más azúcar o agua. Para poder consumirla hay que esperar por lo menos tres días.
Durante ese tiempo se dejará macerar en un lugar oscuro y fresco. Después se pasa la mezcla por un colador y ya está lista para servir bien fría.
La limonada leonesa tiene un sabor similar al del zurracapote y la sangría y es especialmente conocida, no solo en León sino en Segovia, Soria, Toledo, Ávila, Guadalajara y Madrid.
Origen de la limonada leonesa
Conocer el origen de las tradiciones siempre es interesante y, sobre todo, necesario. Sin embargo, estos orígenes no siempre son bonitos, agradables o inspiradores.
Lamentablemente, este es el caso del origen de la limonada leonesa. Aunque está deliciosa y es una receta típica de Semana Santa que no se puede dejar de probar, su historia no es muy agradable.
Aunque el origen exacto está muy discutido, la mayoría de las historias y leyendas sobre la tradición de la limonada leonesa, tienen en común la violencia contra la comunidad judía durante la Edad Media, que se daba, especialmente en la época de Semana Santa. Hay documentadas varias historias en las que caballeros leoneses hostigaban (y cosas peores) a los judíos y luego lo celebraban con limonada leonesa. Aunque las historias no están probadas, lo que no se puede negar es que hoy en día en muchos lugares de León, aún se usa la frase “ir a matar judíos” para referirse a ir a tomar limonada leonesa.
También es totalmente seguro que la limonada leonesa era la única bebida alcohólica que estaba permitida durante los días de Semana Santa y hasta el Domingo de Pascua. Aunque se desconocen los motivos exactos para esta permisión, se teoriza que el motivo era “apaciguar los ánimos” de la población para evitar esta clase de enfrentamientos.
Limonada leonesa en la actualidad
Por suerte, la polémica expresión poco a poco va dejando de usarse, aunque aún son muchos los que señalan que debería haber desaparecido del todo hace ya mucho tiempo.
En cambio, la tradición de beber limonada leonesa en Semana Santa sigue tan arraigada como siempre. Todos los años sólo en la provincia de León se despachan aproximadamente 200.000 litros de limonada leonesa y muchos locales de hostelería abogan por servirla durante todo el año.
La mayoría de los bares y restaurantes de Castilla y León sirven limonada artesana durante estos días, pero también es cada vez más popular la opción de la limonada preparada.
Probar a prepararla por su cuenta es tan fácil como elegir uno de los vinos de su cesta de Navidad y seguir la receta que hemos explicado al principio. Al tratarse de una bebida con el vino como base, es fácil hacer un maridaje de queso y vino o servirlo acompañado de tapas de jamón.
Si se estaba preguntando qué vino beber en Semana Santa, ya tiene la mejor respuesta: La limonada de vino o limonada leonesa es el acompañamiento perfecto para cualquier hora y cualquier comida.